Por primera vez desde 1980 «La Passió» de Altea, que escenifica el grupo de teatro Pla i Revés, tendrá una representación en castellano para que puedan contemplar un mayor número de espectadores este drama sacro que abre los actos de la Semana Santa Alteana. El Palau Altea será el coliseo donde se ofrecerá La Passió este fin de semana con la versión en valenciano el sábado a las 20 horas, y la versión de castellano el domingo a las 18 horas.

La Passió d'Altea se ha caracterizado desde sus inicios en ser la única de toda la Comunidad Valenciana que hace la representación de los últimos días de la vida de Jesús en valenciano. Sin embargo, la bajada de espectadores en estos últimos años, «y que diversos colectivos de extranjeros y ciudadanos castellanoparlantes venían reclamando que hubiese una versión que se pudiera entender por ellos, hemos decidido ofrecer por primera vez la escenificación en la otra lengua oficial de la Comunidad Valenciana», afirmó ayer el presidente de Pla i Revés, Joan Carratalà. La Passió es una obra en la que cientos de vecinos de Altea se implican colaborando entre bambalinas o actuando en el escenario.

Casi medio millar de personas colaboran para que La Passió sea un espectáculo y que nada falle. Modistas que cosen a mano el vestuario, carpinteros que construyen los escenarios, electricistas que ponen a punto los focos y los efectos de luz, técnicos de sonido que manejan los micrófonos, pintores que decoran telas y maderas, y actores aficionados que se implican al máximo durante meses en los ensayos. En el escenario hay momentos en que se juntan cerca de 200 actores de entre ocho meses y 85 años de edad, como la llegada de Jesús a Jerusalén o cuando, prisionero, Pilatos lo muestra al pueblo para que decidan si lo salvan a Él o a Barrabás. Y coordinándolo todo está al frente su director y autor del libreto, Vicent Lloret. Cada año hay novedades, y para la representación de este fin de semana «se han introducido nuevas escenas que se habían dejado de interpretar como la del leproso, la resurrección de Lázaro y las negaciones de Pedro», explica Carratalà.

Ayer, el concejal de Cultura, Diego Zaragozí, afirmó que La Passió «es uno de nuestros referentes culturales que diferencian a Altea. Treinta y ocho años representándose este drama han calado profundamente en nuestro pueblo, y hoy en día no se concibe la Semana Santa alteana sin La Passió para iniciarla». Por su parte, Vicent Lloret explicó que durante estos tres últimos meses «ha habido un trabajo arduo en la preparación de la obra con ensayos en dos lenguas. Todo un reto para los actores que ofrecerán una obra diferente, y por ello esperamos la colaboración del pueblo de Altea y los vecinos de la comarca con su asistencia», manifestó.