Hubo punto estrella, aunque no estaba en el orden del día. El pacto de facto entre el PP, Ciudadanos (Cs) y Ciudadanos por Benidorm (CBM) con el que los populares han logrado asegurar la gobernabilidad de la ciudad turística fue la melodía que más sonó en el pleno ordinario de este mes, que se celebró durante la mañana de ayer en el Consistorio benidormense, después de que hace escasos diez días esta alianza aprobara las cuentas para 2017. La de ayer fue una sesión de poco calado que se liquidó al filo de las 14.00 horas tras debatir tan sólo tres mociones y aprobar cinco puntos de puro trámite elevados por el ejecutivo municipal.

Aunque no estaba incluido en la convocatoria del pleno, el foco de atención volvía una y otra vez a los pactos que, aún en la sombra, permiten asegurar la gestión en la ciudad turística. No importaba cuál fuera el objeto de debate ni el punto a tratar.

Pero, sin duda alguna, fue en el debate sobre la moción presentada por Ciudadanos (Cs) para mejorar el sonido del salón de actos del Ayuntamiento donde la polémica, en este sentido, subió de tono. Más aún tras el rechazo a aprobar la enmienda presentada por el grupo socialista para retocar la propuesta de la formación naranja en Benidorm.

«Hace menos de dos semanas, en el pleno de presupuestos, presentamos una enmienda en este sentido pero se nos rechazó y ahora la traen Cs y se aplaude», criticó la edil del PSOE Cristina Escoda, quien en este punto del debate tomó la palabra. La concejal, además, aprovechó su intervención para reprochar al PP que «en esta ciudad sólo se enteran de lo que suceden ustedes y los cuatro que ustedes quieren». Las críticas por falta de transparencia no tardaron en obtener respuesta por parte del portavoz del ejecutivo municipal, José Ramón González de Zárate, quien se defendió a base de ataque. «Falta de transparencia es lo que había cuando ustedes gobernaban».

Minutos más tarde, dentro del debate de ese mismo punto, el representante de CBM, Arturo Cabrillo, admitía que su grupo era consciente de las intenciones del gobierno local para reformar el salón de actos del Ayuntamiento. Afirmación que volvió a despertar el enfado del PSOE. «Aquí hay concejales que tienen información privilegiada», lamentó el portavoz socialista, Rubén Martínez.

También en el debate de las dos mociones presentadas por Compromís-Los Verdes, la alianza entre PP, Cs y CBM fue objeto de crítica. «Ya tenían preparado este teatro», lamentó el portavoz del grupo, Josep Bigorra, cuando vio como Ciudadanos sí votaba las enmiendas del PP para retocar sus mociones pero se oponían a las mismas en la votación final.