Después de dos meses cerrada a cal y canto por los devastadores efectos del temporal, la CV-70 que conecta Benidorm con Alcoy a través del valle de Guadalest, volvió a recibir ayer a los primeros vehículos después de que la conselleria de Vivienda, Obras Pública y Territorio, que dirige María José Salvador, haya realizado una inversión de más de un millón de euros para reparar los destrozos causados por las fuertes lluvias del pasado mes de enero.