Los ayuntamientos de Altea, La Nucía y l'Alfàs del Pi se han visto obligados a vetar, por segunda vez en menos de dos meses, el consumo de agua del grifo a cerca de 60.000 vecinos. Los altos niveles de turbidez que se han generado en los caudales procedentes del pantano de Guadalest -de los que se abastecen estas tres localidades- tras el temporal que ha azotado a la provincia durante los últimos días ha sido la causante de esta nueva restricción.

Desde el Consorcio de Aguas de la Marina Baixa ya advirtieron a primera hora de ayer que el azud del Algar estaba soportando escorrentías con muchos arrastres de aproximadamente 38 metros cúbicos por segundo.

Este hecho disparó los niveles de turbidez de los caudales que llegaron a superar ayer el límite establecido, según las analíticas realizadas desde la Dirección General de Salud Pública de la Generalitat. Por ello, desde Altea, La Nucía y l'Alfàs se optó ayer por emitir un bando municipal con el objeto de trasladar a los cerca de 60.000 vecinos afectados el nuevo veto impuesto al agua del grifo de sus viviendas.

Hay que tener en cuenta que los residentes de Altea la Vella y de la zona de la sierra de este mismo municipio se libran de la restricción al abastecerse de otros suministros.

En las tres localidades se aconseja a los vecinos afectados no usar el agua del grifo para el consumo humano, cocinar o incluso para ducharse. Las mismas recomendaciones que ya se realizaron el pasado mes de diciembre cuando, tras las fuertes inundaciones que se vivieron en la provincia, se detectó que el nivel de turbidez del agua también superaba el límite establecido.

Más analíticas

De momento, no hay fecha para saber hasta cuándo se prolongarán las restricciones del consumo de agua del grifo en estas tres localidades de la Marina Baixa. No obstante, los gobiernos locales de los tres municipios afectados adelantaron ayer que se intensificará el volumen de analíticas que se realizan para controlar cómo evoluciona el nivel de turbidez de los caudales y levantar, en el menor tiempo posible, el veto a miles de residentes.