Hace años éramos reacios a acudir al psicólogo o al psiquiatra. ¿Esto está cambiando?

Sí. Un psiquiatra es un médico de la conducta que pone orden y concierto en la personalidad. La psiquiatría es una rama de la amistad. La relación médico-enfermo en psiquiatría es entrañable, el paciente se abre y cuenta más cosas de las que puede retener. Esa casi un amigo, un amigo que da fármacos.

¿Por qué están aumentando los casos de niños y jóvenes con problemas psiquiátricos y psicológicos?

La primera epidemia ahora en los países occidentales son las parejas rotas. Al quebrarse las familias, aparecen los niños ping-pong que van de un sitio a otro. Me encuentro a muchos en la consulta con depresiones, ansiedad, trastornos de personalidad...

¿Cómo se puede evitar esa quiebra de las familias?

Para mejorar una relación yo daría tres consejos. Primero, evitar discusiones innecesarias; segundo, no sacar la lista de agravios del pasado y, por último, aprender a perdonar.

También parecen aumentar las depresiones en adultos. ¿Se avanza en su curación?

Se ha avanzado mucho en las enfermedades depresivas gracias a tres factores: los antidepresivos, el estimulador magnético transcraneal que mejora en un 72% las depresiones crónicas, y la estimulación eléctrica del nervio vago. También se ha avanzado mucho ante las crisis de pánico que son episodios de ansiedad breves y el 95% de los casos, se curan.