Más de 5.000 vecinos en las zonas del puerto, casco antiguo y Pla del Castell de Altea permanecieron sin luz durante más de cinco horas tras el fallo eléctrico provocado por la caída de dos torretas de luz y otra avería en una tercera torre de media tensión, según informaron fuentes de la Policía Local. Iberdrola confirmó que se vieron afectados un total 4.800 puntos de suministro en la localidad debido a diversas averías provocadas por el temporal y pasadas las 21.30 horas se restableció el servicio a la mitad de los perjudicados. La compañía aseguró que los trabajos culminarían pasadas las 22.00 horas para devolver el suministro a todos los residentes afectados.

El fuerte viento de la tormenta, con picos que llegaron a los 106 km/h, según datos aportados por el Club Náutico de Altea, provocó además el derrumbamiento del techo de varias naves industriales del polígono Montahud de Altea, junto a la carretera comarcal que va a La Nucía. En la rotonda del cruce de esta vía con la que se dirige a L'Alfàs del Pi se cortó el tráfico a media tarde por la caída de una gran valla publicitaria en medio de la calzada.

Por otro lado, el viento derrumbó al mediodía dos árboles en las inmediaciones del puerto deportivo Campomanes, cortando la vía de acceso al mismo desde la carretera N-332 por lo que fue necesaria la intervención de una unidad del parque comarcal de bomberos de la Marina Baixa.

Las fuertes rachas de viento tiraron igualmente diversos árboles en la avenida Juan Alvado y en el paseo marítimo, siendo necesaria la intervención de las brigadas de jardinería de la Empresa Pública de Desarrollo Municipal. Asimismo, numerosos árboles frutales e invernaderos que albergan plantaciones de nísperos fueron arrancados de cuajo, según fuentes de la Cooperativa Agrícola de Altea, que indicaron que la tierra "ya escupe el agua de la lluvia y las raíces no aguantan".

Por otro lado, las instalaciones del Club Náutico de Altea se vieron afectadas con la rotura de un pantalán, aunque las embarcaciones permanecieron amarradas con seguridad dado que las previsiones de los fuertes vientos sirvieron para preparar medidas de protección por parte del personal del club.

En otro orden de cosas, la nueva playa del centro urbano de Altea desapareció prácticamente en su totalidad y las olas llegaron a inundar garajes y lanzar piedras a la calzada. Por su parte, fuentes de la Policía Local manifestaron que hubo que cortar por la tarde el puente que pasa sobre el río Algar enlazando la Ciudad Deportiva con la vía verde y camino de san Tomas debido a que el nivel del agua creció por encima del vial.