El fuerte temporal marítimo, con importantes rechas de viento y olas de cuatro metros, obligó a cerrar el puerto de Dénia. La naviera Baleària canceló todos los barcos que zarpaban desde la ciudad y también los que debían llegar.

Las flotas pesqueras de Altea, Dénia, Xàbia, Calp y Moraira permanecieron amarradas a puerto. En Altea la flota, compuesta por 12 embarcaciones de arrastre, tres de cerco y cuatro de trasmallo, no pudieron salir a faenar debido al temporal y las fuertes rachas de viento que llegaron a alcanzar los 50 km/hora. Por otro lado, la intensa lluvia, de la que al mediodía se habían recogido 55 litros por metro cuadrado desde la noche anterior, según datos de la estación meteorológica del Club Náutico de Altea, provocó pequeñas inundaciones en algunos sótanos y plantas bajas, aunque no fue necesario avisar a los bomberos, según fuentes de la Policía Local.

Desde la Cofradía de Pescadores de Altea informaron que actualmente existe un banco de pescado azul frente a la bahía de Altea y que amarrar en puerto a las embarcaciones «supone pérdidas para el sector». En la pesca de cerco trabajan entre 10 y 12 pescadores por embarcación, «que tienen unos gastos fijos de entre 1.800 y 2.500 euros diarios», afirmaron desde la Cofradía. Esta semana además se han sumado 4 barcas de Xàbia y una de Torrevieja que permanecían ayer al abrigo del puerto.