Unas obras para posibilitar la reapertura del acceso a la playa de Levante de Benidorm desde el Torrejó han sido el detonante de una agria polémica entre populares y socialistas a cuenta de la supuesta destrucción de parte de los restos del búnker de la guerra civil que allí se encuentra.

Así, el portavoz del PSOE, Rubén Martínez, acusó ayer a la edil de Patrimonio Histórico, Ana Pellicer, de permitir la destrucción de gran parte de los restos del búnker de la Guerra Civil que se encuentra junto al Torrejó para realizar una rampa de hormigón para acceder a la playa de Levante. Por ello, el representante socialista llegó a exigir la dimisión de la concejal. «Es un hecho gravísimo que debería de tener consecuencias inmediatas por parte de los responsables», lanzó ayer Martínez, quien consideró que tras el vertido de hormigón será «muy difícil» recuperar estos restos, que podían significar un elemento de atractivo para los visitantes.

Por su parte, la edil de Patrimonio Histórico salió al paso de las acusaciones al asegurar que «las obras de adecuación de la rampa de acceso a la playa de Levante a la altura de El Torrejó no han afectado al búnker, o nido de ametralladoras». Pellicer explicó que «esta adecuación se ha hecho respetando la alineación de la antigua rampa», que debido a su mal estado se cerró al tránsito hace años.

La edil recalcó que la nueva rampa, como la anterior, finaliza justo en las rocas que marcan el inicio de los restos del nido de ametralladoras. Unos restos que «estos días no son visibles por la acumulación de arena que hay en este punto de El Torrejó debido al efecto de las mareas», según apuntó ayer la concejal del grupo popular.