El pleno del Ayuntamiento de Benidorm ha entregado esta mañana la medalla coporativa de la ciudad al agente de la Policía Nacional Miguel Campos Fernández, por los servicios prestados como voluntario en el Centro de Refugiados de Sicilia, dependiente de la Agencia Europea de Asilo. El acto se ha realizado en el pleno institucional con motivo del Día de la Constitución, en el que han participado numerosos ediles de la corporación municipal, representantes de la Policía Nacional, Guardia Civil, Policía Local y Protección Civil, así como una nutrida representación de la sociedad benidormense.

El alcalde de la ciudad, Toni Pérez, ha reconocido la labor solidaria desplegada en Italia por Miguel Campos Fernández, señalando que personifica los valores que encierra la Constitución. «Su colaboración en la asistencia a personas de distinta procedencia sin discriminación de raza, sexo, religión o cualquier otra condición, y su defensa de los derechos fundamentales de las personas, especialmente de los que huyen de conflictos armados en sus países de origen, lo hacen especialmente merecedor de esta distinción».

El policía, visiblemente emocionado por recoger la máxima distinción de la ciudad, ha trasladado que siempre fue su vocación «ser policía y garantizar los derechos y libertades de los ciudadanos, así como la seguridad ciudadana». Asimismo, ha afirmado que, para él, supuso un «grandísimo honor» participar en este programa de apoyo a los refugiados de la Agencia Europea de Asilo y ha hecho un homenaje a otros Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado que continúan trabajando por apoyar a la población víctima de distintos conflictos en todo el mundo.

Defensa de la Constitución

Durante el acto, el alcalde de la ciudad, Toni Pérez, ha realizado una defensa de la Carta Magna, recordando en su discurso institucional que la Constitución de 1978 fue «un ejemplo de consenso porque nuestros representantes políticos, estuvieron a la altura de las circunstancias (?) y supieron dejar a un lado lo que les separaba, para profundizar en todo lo que les unía» y ha destacado que «hoy ya nadie puede dudar de la impagable deuda que tenemos con la Constitución. Y, si en su día sirvió como punto de partida, hoy debe hacerlo como punto de encuentro».