María del Carmen vivía en Benidorm. Tenía 48 años, una hija de 17 y toda una vida por delante. Seguramente, de un tiempo a esta parte, había tejido una amplia cadena de amistades con las que compartía mensajes, fotos y largas conversaciones en distintas redes sociales. Hasta que el pasado 12 de abril, Francisco, su marido, decidió brutalmente «sacarla del grupo».

Lo mismo les pasó a Mariana, Silvia, Mirela, Isabel Laureana, Lucinda, Ana, Paqui, Lisa Jane y, así, hasta una larga y negra lista de 40 mujeres que a lo largo de este año han perdido su vida por culpa de la violencia machista en todo el país.

La Asociación de Vecinos de Els Tolls de Benidorm cubrió ayer la fachada del edificio que sirve como extensión administrativa y centro social del barrio con siluetas de mujeres para rendir homenaje a todas víctimas de la violencia. La intervención se tituló «Ha abandonado el grupo», en alusión al mensaje empleado por una afamada red de mensajería móvil cuando un participante sale de una conversación. Además de las formas de estas féminas, en el montaje se distribuyeron también varias decenas de teléfonos móviles, colgados con lazos de color morado, con una doble finalidad: por un lado, para resaltar que todas ellas fueron amigas, compañeras, madres e hijas, que tuvieron que abandonar los distintos grupos que compartían por la ira de sus maridos, novios o exparejas. Por otro, para trasladar la importancia de implicarse en la lucha contra esta barbarie, llamando al teléfono 061 cuando se sufre o se tiene constancia de algún caso de violencia.

En el acto, junto a numerosos vecinos del barrio, participaron también el alcalde de Benidorm, Toni Pérez; la edil de Igualdad, Ángela Llorca; concejales de distintos grupos municipales de la ciudad, como el PP, el PSOE, Compromís o CBM; representantes de los dos colegios públicos de esta zona de la ciudad y alumnos del Conservatorio Municipal de Música José Pérez Barceló, que interpretaron distintas melodías, entre otros, cuando se leyeron los nombres de las 40 mujeres asesinadas a lo largo de 2016.

Tanto el alcalde como la concejal de Igualdad coincidieron en sus intervenciones en destacar que la ciudad «ha sufrido este año más de cerca que nunca» los efectos de la violencia machista «porque una de nuestras vecinas ha perdido la vida víctima de esta sinrazón». Por ello, destacaron la necesidad de continuar alerta en esta «batalla importantísima, con todos los medios a nuestro alcance» para evitar más muertes y más agresiones a mujeres.

Silencio y manifiesto

Previamente a este acto, el Ayuntamiento también desplegó desde primera hora una pancarta en el balcón del Consistorio mostrando su repulsa contra el maltrato, se celebró un minuto de silencio y se leyó un manifiesto en la plaza consistorial, que corrió a cargo de María Botella, presidenta del grupo comarcal de autoayuda contra el cáncer de mama, Anémona.