A simple vista, podría decirse que montar el fuerte de una peña en una carpa puede parecer incómodo, más teniendo en cuenta que las Festes Majors Patronals de Benidorm se celebran en pleno mes de noviembre. Sin embargo, las peñas que se han decantado por esta opción, iniciando así una innovadora tradición hasta ahora inédita en las celebraciones mayores, afirman estar encantadas, al disponer de mucho más espacio que en un local y seguir disfrutando de la fiesta en pleno centro.
En la calle Molí, la peña El Corralet acondicionó un solar que los propietarios les dejaron, sin previo alquiler, para estos cinco frenéticos días de fiesta. Montar la carpa, sillas y mesas así como acondicionar la zona de la cocina les costó algo más de mil euros, mucho menos que la cantidad que se pide por un local, «donde estas muy apretado», señalan. «Buscábamos local y los dueños nos dejaron utilizar este solar, fue una casualidad, pero repetiremos el próximo año, esto es mucho más cómodo», explican desde esta agrupación festera formada por 12+1 miembros y con 40 años de historia en Benidorm.
Tan sólo una calle más arriba, en La Biga, la historia se repite. Frente al Casal del Fester y tras una lona blanca, la peña Bavallons ha acondicionado perfectamente un solar, ha dispuesto una tarima y ha dividido la carpa -de ocho por diez metros- en dos zonas: la de comidas y una pequeña guardería para los más pequeños.
La peña está formada por 30 adultos y nada menos que 20 niños con edades que van desde meses a los diez años. «Nos ha costado algo más que un alquiler pero no tiene nada que ver, esto es un lujo», detallan desde Bavallons, quienes explican que en el momento de buscar local vieron el solar vacío y decidieron preguntar a los propietarios por el alquiler. Tras tres días de montaje ya tenían la carpa preparada, con la instalación de luz hecha y hasta un vecino les dejó compartir la toma de agua. Tiene dos cocineros y hasta una niñera, dos enormes mesas y afirman estar muy satisfechos con haber cambiado el local por este solar.
Al parecer las carpas han llegado al universo de las peñas para quedarse.
