El Santísimo Cristo del Buen Acierto, patrón de l'Alfàs del Pi, recorrió ayer las calles de la localidad arropado por cientos de festeros y devotos, que quisieron acompañarle en procesión en la última jornada de las fiestas en su honor. La niña Edurne Madrid Soler fue la encargada este año de recitar la Embajada al Cristo al finalizar la procesión y llenó de emoción a los alfasinos que no quisieron perderse este acto tan emblemático. Pasadas las diez de la noche, un gran castillo de fuegos iluminó el cielo de l'Alfàs para poner el mejor broche a los festejos de 2016.