El pequeño comercio de Benidorm quiere plantar batalla para evitar la proliferación de centros comerciales en la ciudad. Así lo avanzó ayer el presidente de la Asociación Independiente de Comerciantes de Benidorm y Comarca (Aico), Raúl Parra, quien anunció que su agrupación está estudiando llevar a los tribunales por la vía del Contencioso la modificación puntual número 19 del Plan General de la ciudad, aprobada definitivamente el pasado lunes en pleno, y que abre la puerta a la implantación de grandes superficies en todo el término municipal.
La medida, acordada en pleno con el voto mayoritario de la Corporación, busca eliminar las últimas trabas que todavía quedaban pendientes para propiciar la construcción del primer centro comercial de Benidorm, proyectado por la multinacional francesa Unibail Rodamco en terrenos del futuro polígono industrial. Este proyecto colea desde hace más de una década y, aunque en los últimos años se han dado pasos para desatascarlo, la aprobación de este cambio en el planeamiento urbanístico era un trámite imprescindible para que el mismo sea viable a corto-medio plazo.
La aprobación definitiva en pleno de esta modificación del PGOU el pasado lunes trajo aparejada, también, la desestimación de las tres alegaciones presentadas contra la misma, una de ellas por parte de Aico; las otras dos, por dos grandes superficies ubicadas en el vecino municipio de Finestrat. Entre ellas, los comerciantes de Benidorm exponían que se ha producido un «gravísimo defecto de procedimiento realizado por parte del Ayuntamiento» para sacar adelante esta modificación del Plan General, entre otras cosas, porque no se han redactado informes previos, como la memoria de sostenibilidad económica o documentos de evaluación ambiental y territorial, que avalen dicha modificación.
Ante esta situación, los asociados a Aico celebraron la noche del jueves una asamblea general para determinar distintas líneas de actuación con las que hacer prevalecer su rechazo a las grandes superficies. Entre ellas, según aseguraron ayer desde esta asociación, figura la posible interposición de un recurso contencioso-administrativo, para que sea un juez quien tenga la última palabra. Como explicó Raúl Parra, «aunque ahora sólo haya un proyecto de centro comercial, liberalizando todo el término municipal como se ha hecho con esta modificación después podrían venir otros», lo que desde Aico consideran una «clara y directa amenaza» contra el sector del pequeño comercio. De ahí que, para los comerciantes, en la propia modificación debería haberse puesto coto y limitado la construcción de grandes superficies, bien en una zona concreta de la ciudad, como podría ser el polígono; bien limitándolas a un número determinado.
Igualmente, desde esta agrupación criticaron, a través de un comunicado, la «falta total de atención y escucha a los problemas del comercio local» por parte del Ayuntamiento, quien, a su juicio, «nos ha dado totalmente la espalda». Por ello, exigieron que se le «reconozca al comercio turístico de Benidorm la importancia y el peso económico que tiene sobre la ciudad».
