La Junta de Gobierno Local de Benidorm aprobó ayer el proyecto de renovación y peatonalización del tramo de Tomás Ortuño, comprendido entre las calles Mercado y La Garita, así como el expediente de contratación para la licitación abierta y urgente de las obras, valoradas en medio millón de euros. El alcalde, Toni Pérez, indicó que el objetivo de esta actuación es «dotar a este tramo, por el que cada día transitan miles de personas, de mayor seguridad peatonal y también de una mejor accesibilidad».

En concreto, la actuación costará 498.995,28 euros y plantea dejar calzadas y aceras al mismo nivel con un tratamiento de pavimento similar al del tramo de Tomás Ortuño que ya es peatonal. También prevé la colocación de arbolado ornamental, y la renovación de las infraestructuras hídricas del subsuelo, concretamente de las pluviales y de las conducciones de agua potable «que se encuentran en muy mal estado debido a que en algunos casos tienen una antigüedad de más de 40 años».

En lo relativo al acceso de vehículos, el alcalde detalló que «sólo podrán circular por este tramo los residentes y los vehículos de carga y descarga en el horario que se autorice para esta actividad, por lo que el resto del tráfico se derivará por Ramos Carratalá y La Garita».

Asimismo, el primer edil recordó que esta peatonalización y renovación nace de «una petición vecinal y de los comerciantes, y de una moción del grupo municipal Ciudadanos (C´s)», que quedó supeditada al Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), recientemente aprobado. El proyecto, elaborado por los técnicos municipales, tiene un plazo de ejecución de dos meses.

Hay que tener en cuenta que una parte de la partida destinada a esta actuación procede de los fondos que se reservaron para convertir a Benidorm en una ciudad inteligente. No obstante, el rechazo del Gobierno central a otorgar una subvención para esta iniciativa hizó que el Ayuntamiento aparcara la misma y dedicara estas reservas a otros fines, como a la peatonalización de este tramo de Tomás Ortuño.