El Burger King de Jaime I de Benidorm ha echado definitivamente el cierre tras acatar la orden municipal que les obligaba a desalojar el local de comida rápida por encontrarse en una parcela de titularidad pública. Tras muchas idas y venidas, la mercantil Quick Meals Ibérica ha abandonado las instalaciones, aunque sin fecha ni proyecto para llevar a cabo el derribo de las mismas.

Como ya adelantó este periódico, el Ayuntamiento alcanzó un acuerdo con la empresa para que desalojara el local una vez pasado el verano y, además, procediera a su derribo. No obstante, más adelante se decidió salvar parte de las instalaciones para reconvertirlas en un almacén municipal.

La modificación ha provocado que aún se esté elaborando un proyecto definitivo sobre cómo efectuar el derribo por lo que no hay un plazo marcado para la demolición, según explicó ayer la edil de Urbanismo, Lourdes Caselles.