La falta de actividad en el mercado municipal de Benidorm y la acumulación de puestos vacíos no es nueva. Se viene prolongando, prácticamente, desde que se cortó la cinta inaugural tras la renovación de todo el edificio en 2008. Y tiene en una herencia parte del foco que ha traído el resto de problemas.

En el mercado existen dos tipos de locales: los exteriores, que son privados; y los interiores, que pertenecen al Ayuntamiento y se adjudican en régimen de concesión. Sin embargo, para regularizar ante notario la división horizontal, deben ponerse de acuerdo todas las partes afectadas. Sin embargo, un conflicto entre los herederos de uno de los locales exteriores ha impedido que en ocho años se haya podido saldar este trámite, por lo que, legalmente, hasta ahora todos los locales continúan siendo uno. Al no estar divididos, los adjudicatarios no pueden escriturarlos a su nombre ni hipotecar la concesión para poder hacer frente al pago, lo que ha llevado a muchos a acabar cerrando. R. P.