Dos planes de remodelación urbana se llevarán el presupuesto municipal destinado a la iniciativa que iba a convertir a Benidorm en una auténtica ciudad inteligente. Tras el rechazo del Ministerio de Fomento de otorgar a la capital de la Costa Blanca la subvención de 5 millones de euros para implementar el proyecto de smart city, el equipo de gobierno ha decidido invertir los fondos locales reservados para este fin en la peatonalización de la calle Gerona y la semipeatonalización de la parte baja de la vía Tomás Ortuño.
El alcalde, Toni Pérez, presentó ayer esta propuesta que previamente se comunicó al resto de grupos de la corporación en la comisión informativa de Hacienda.
El proyecto de peatonalización del tramo de Gerona comprendido entre las calles Esperanto y Dr. Orts Llorca se aprobó la pasada semana en Junta de Gobierno Local y está valorado en cerca de 380.000 euros, tal como recordó en rueda de prensa el primer edil. Esta iniciativa prevé convertir este tramo «en cien por cien accesible, eliminando todas las barreras arquitectónicas y dejando aceras y calzada a la misma altura, aunque diferenciadas por dos tonos diferentes de hormigón desactivado», afirmó Pérez. Además, se incluye la creación de un sistema de recogida de aguas pluviales que evite pequeñas inundaciones en caso de lluvias intensas, la introducción de arbolado y la renovación del alumbrado público -que funcionará con fibra óptica-.
El segundo de estos proyectos engloba la semipeatonalización de la parte baja de la calle Tomás Ortuño, entre las vías Mercado y La Garita. Pérez recordó que esta propuesta nace de «una petición vecinal y de los comerciantes, y de una moción del grupo municipal Ciudadanos (C's) vinculada a la finalización del Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), recientemente aprobado». El alcalde señaló que el proyecto, una vez sea redactado por los técnicos municipales, se deberá elevar al próximo Consejo Asesor de Escena Urbana para su aprobación.
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Pérez especificó que aún no se ha determinado un coste para esta última iniciativa, dado que la redacción del proyecto está pendiente. Con todo, se comprometió a que estas mejoras en dos zonas que, según recordó, «son transitadas por muchísimos turistas y soportan una importante presión de residentes», estén culminadas a finales de este año.
El ejecutivo municipal se ha decantado por esta iniciativa después de que los informes técnicos señalen que las iniciativas del proyecto «Ciudad Turística Inteligente y Sostenible» no pueden abordarse de forma aislada, según explicaron fuentes municipales.
En esos mismos informes, los técnicos inciden en que se aproveche la renovación de las calles para implementar proyectos pilotos vinculados a las nuevas tecnologías y que, por tanto, sirvan para alimentar ese plan y avanzar en el objetivo de hacer de Benidorm una smart city. Entre esos proyectos pilotos estaría, por ejemplo, la instalación en las calles renovadas de elementos de alumbrado público con dotación de fibra óptica y con cámaras de control de tráfico, tal como informó ayer Pérez.
Por otra parte, el alcalde avanzó que espera poder contar en el presupuesto municipal de 2017 con una partida destinada a iniciar la renovación de la avenida Mediterráneo.
