La Conselleria de Vivienda, Infraestructuras y Ordenación del Territorio ha iniciado el proceso de diseño y definición de un gran sendero «para la movilidad no motorizada» (peatonal, ciclista, ecuestre) que unirá la Comunidad Valenciana de norte a sur, desde Vinaròs hasta Pilar de la Horadada, con más de 500 kilómetros de longitud.
«La vía Litoral» ha sido incluida en la Estrategia Territorial de la Comunidad Valenciana y constituye un reto de «enormes proporciones», según fuentes de la conselleria. No tanto por su coste, que también, aunque existe posibilidad de financiación europea, sino por la complejidad de abrirse paso en un litoral intensamente ocupado.
Apoyarse en lo construido
Fuentes de la conselleria explicaron que para poder lograr este objetivo es necesario, casi obligado, desarrollar un sistema de conectividad «apoyándose en vías pecuarias, sendas tradicionales, caminos rurales, paseos marítimos, etc...».
La vía discurrirá siempre que sea posible pegada a la costa, lo que no facilita las cosas. En ese sentido las fuentes admiten que el trazado de esta ruta verde es muy complejo debido a la masiva ocupación del litoral y por eso se deberá ir concretando por tramos
Además, la vía debe estar conectada con otros recorridos locales y con los principales hitos paisajísticos del litoral como los miradores costeros, espacios de interés natural, parques y parajes naturales, marjales, espacios de la red Natura 2000. Otro aspecto destacado de la Via del Litoral es la existencia proyectada de un trazado principal y de otros secundarios que conectan de forma transversal con otras rutas como la de la Vía Augusta, los senderos que comunican entre sí las Torres Vigías, la Vía Dianium o la prevista ruta de Jaume I.
«Cuando esté delimitada a escala territorial, el Pativel (Plan de Acción Territorial de Infraestructura Verdel Litoral) la incluirá y establecerá una normativa para involucrar a los ayuntamientos del litoral en la concreción final de su trazado, incluyendo mecanismos de gestión urbanística para obtener determinados tramos más complejos», explican en la conselleria.
Finalmente, el trazado buscará sinergias con los proyectos del Pativel dirigidos a a definir las zonas más sensibles del litoral de modo que facilite la demanda de fondos europeos para la regeneración urbana y paisajística del litoral.
Una vez establecido el recorrido básico, se incluirá dentro del gran proyecto europeo E-10, que pretende conectar el litoral mediterráneo español con un trazado que finaliza en Nuorgam, la población de Finlandia situada más al norte, dentro ya del círculo polar Ártico.
La gran ruta europea
El E-10 tendrá 2.880 kilómetros de longitud, atravesará Finlandia, Alemania, República Checa, Austria, Italia, Francia y el litoral mediterráneo español hasta la costa de Tarifa.
En un informe/diagnóstico sobre el escaso desarrollo del senderismo en España en comparación con Europa, donde existen 900.000 kilómetros balizados, el Ministerio de Medio Ambiente asegura que se está «obviando la importancia de los distintos valores asociados a esta actividad (beneficiosa para la salud, respetuosa con el medioambiente, accesible,?), su influencia positiva en el turismo, y el desarrollo de las zonas rurales, o el movimiento económico que genera el senderismo tanto directa (desplazamientos, material excursionista, guías y mapas, alojamientos...) como indirectamente (restauración y servicios)».
