El grupo popular del Ayuntamiento de Altea denunció ayer, mediante un comunicado, «la adjudicación de dos contratos de la Concejalía de Fiestas sin el informe del técnico correspondiente por un importe de 17.999,99 euros cada uno con la finalidad de evitar el procedimiento negociado». El portavoz popular, Pedro Barber, señaló que «es una práctica irregular del equipo de gobierno del alcalde Jaume Llinares». Por su parte, el concejal de Fiestas, Vicent Ripoll, explicó que la denuncia del PP «está hecha con mala intención» dado que «ellos conocen perfectamente que estos contratos corresponden a parte de la subvención municipal para las fiestas patronales». El edil indicó que la comisión de fiestas «tiene libertad para contratar los espectáculos o fuegos artificiales, y el Ayuntamiento les exige facturas para dotar la subvención. Estos contratos son para los fuegos artificiales y la carpa de la barraca popular», afirmó.