El Ayuntamiento de Benidorm vallará la Torre de les Caletes, ubicada en el parque natural de la Serra Gelada, para intentar frenar el deterioro que sufre esta construcción mientras busca diferentes soluciones para asegurar su conservación y evitar el riesgo de desprendimientos. Así se acordó ayer, en una reunión a tres bandas mantenida por el Consistorio, el Servicio Provincial de Costas y la Conselleria de Cultura, después de que el Ayuntamiento trasladara a ambas administraciones su preocupación por el estado en el que se encuentra esta torre vigía del siglo XVI, declarada Bien de Interés Cultural (BIC).

La edil de Cultura y Patrimonio Histórico, Ana Pellicer, explicó que su departamento se puso en contacto con Conselleria «alertados por el estado que presenta la torre, con riesgos de desprendimientos que pueden afectar a su estructura y que también podían suponer un peligro para las personas que visitan este punto de la Serra Gelada». De ahí que, según dijo, «la actuación más inminente» será el vallado, como una «primera barrera de protección» mientras se estudia el resto de alternativas.

Una vez que se haya cercado el perímetro para asegurar esta histórica edificación, que en su día fue una de las numerosas torres de vigilancia diseminadas por la costa para alertar a la población de los ataques piratas, las tres administraciones se han comprometido a buscar soluciones conjuntas para este enclave. Para ello, según Pellicer, se ha fijado una visita con los representantes de todas ellas, que probablemente se realizará a finales de agosto, para conocer «in situ» la problemática y «plantear las actuaciones más plausibles».

Por último, la concejal popular dijo que, «desde el Ayuntamiento vamos a reivindicar y trabajar por la conservación de esta torre como parte vital de nuestro patrimonio», a lo que agregó que «se trata de una causa compartida, como así han trasladado grupos municipales -como Compromís- y también ciudadanos preocupados por el estado actual que presenta».