El equipo de gobierno popular de Benidorm presentará en el próximo pleno que se celebra el lunes el nuevo pliego de condiciones para la gestión de las playas y calas de la ciudad. Entre las principales novedades que deberán cumplir las empresas que aspiren a explotar las playas se encuentra la gestión integral de los servicios -ahora mismo se realizan dos contratos diferentes- y la reducción de las hamacas en alrededor de 700 -se establece el límite en 6.300-.

El edil de Playas, Lorenzo Martínez, informó ayer que el pliego «de entrada plantea reducir el número de hamacas en las playas de Levante, Poniente y Mal Pas, al tiempo que se reserva la posibilidad de revisar el número y ubicación de las mismas». En relación a las calas de L'Almadrava y del Tío Ximo, el concejal señaló que «este equipo de gobierno entiende que ambas deben mantenerse en su estado natural, libres de mobiliario y actividad, con el fin de establecer un equilibrio entre las playas urbanas y las naturales». No obstante, aclaró que la Ley de Costas permite plantar 20 y 16 hamacas en estas zonas, respectivamente.

El pliego establece entonces que la empresa que gestione las playas se hará cargo tanto de la explotación del mobiliario urbano como del salvamento y socorrismo, del mantenimiento, la limpieza y de las playas accesibles.

La gestión integral a las playas parte de «un precio mínimo de licitación al alza» de 520.000 euros anuales, y su duración será de cinco años con posibilidad de prórroga por otros cinco.

Martínez detalló que en el nuevo contrato se exige a las empresas interesadas una serie de «obligaciones extraordinarias», entre ellas «retomar las tres biblioplayas» -recuperando así la de la zona de La Cala- y mantener abierto durante «todo el año los tres puntos de playas accesibles», ya que durante los meses de invierno desaparecía el punto ubicado frente al hotel Delfín.

Además, la concesionaria deberá aportar 500 metros lineales de pasarelas enrollables; disponer en cada sector de hamacas de cinco unidades adaptadas para usuarios con movilidad reducida; instalar, mantener y almacenar las dos plataformas de juegos flotantes y crear una brigada de dos personas que de lunes a viernes se encarguen de tareas de mantenimiento y de un retén de fin de semana, entre otras medidas.

Críticas

Los grupos en la oposición avanzaron ayer sus posturas acerca de este nuevo pliego. Ciudadanos recordó que en el pleno de mayo se aprobó una de sus propuestas para que las playas cuenten con servicios extra como la creación de una zona de masajes o de un espacio para poder cargar móviles y tabletas, «iniciativas que ahora no se contemplan», señalaron.

Por su parte, el PSOE también denunció que finalmente no se instalen hamacas y sombrillas en las calas Almadrava y de Tío Ximo. «No entendemos que se deje el servicio cuando siempre lo han tenido», afirmaron. Mientras que desde Liberales criticaron que no se haya puesto en marcha antes la bilioplaya en la Cala, ya que este pliego se aprobará de cara al próximo año.

Finalmente, Compromís-Los Verdes criticó la excesiva duración del contrato, que se establece en cinco años con una prórroga de otros cinco más. El grupo nacionalista avanzó que presentará una alegación para que el número de hamacas no suponga en ningún caso más del 40% de la superficie total de las playas.