Benidorm adjudicó ayer, en pleno mes de julio, la oferta lúdica de sus playas. El anterior contrato venció el pasado mes de junio y los recursos presentados por algunas de las mercantiles que se postulaban para gestionar estos servicios han retrasado el proceso que ya ha quedado zanjado.

No obstante, los retrasos han provocado que, durante las primeras semanas del verano, los arenales hayan carecido de una oferta complementaria que registra una alta demanda por parte de los visitantes. Plataformas de juegos flotantes, hidropedales, kayaks, motos acuáticas, entre otros elementos todavía no han desembarcado en las playas de la capital de la Costa Blanca a causa de estos retrasos.

No hay que olvidar que los técnicos hallaron deficiencias en una de las propuestas presentadas y la mercantil en cuestión decidió presentar un recurso que ayer fue rechazado por el Consistorio, lo que dio vía libre a la adjudicación de los siete lotes que componen el paquete de ocio. El Ayuntamiento se embolsará cerca de 150.000 euros al año en concepto de estos servicios.

La intención es aprobar el próximo lunes el acuerdo para agilizar al máximo la puesta en marcha de los juegos, como adelantaron fuentes municipales.