Las obras de mejora de la red de abastecimiento de agua potable en el barrio de San Isidro comenzarán en aproximadamente 10 días y tendrán una duración de dos meses. Ayer tuvo lugar el acto de replanteo al que acudieron el alcalde, Andreu Verdú; el concejal de Aguas, Pedro Alemany; el concejal de Urbanismo, Jaime Ramis; la concejala de Igualdad y Participación Ciudadana, Pilar Baigorri y vecinos del barrio. Esta actuación, que se realizará a través del Plan de Inversiones comprometido por la empresa concesionaria Hidraqua, solucionará los problemas de presión y caudal de la zona. Para ello se renovarán 460 metros de tubería, 3 bocas de agua contra incendios, 7 válvulas de compuerta y 36 acometidas.