­Multitudinaria rueda de prensa en el Ayuntamiento de Benidorm por el número de ediles que se pusieron ayer ante los micrófonos para explicar su abandono del pleno del pasado lunes así como para recalcar su firme rechazo a la prórroga de la concesión del agua que salió adelante en ese misma sesión con los 15 votos del PP y el PSOE. Así, los portavoces de Ciudadanos (C´s), Ciudadanos por Benidorm (CBM), Liberales y Compromís-Los Verdes -Rafael Gasent, Arturo Cabrillo, Gema Amor y Josep Bigorra, respectivamente- junto al edil no adscrito, Leopoldo Bernabeu, hicieron frente común para criticar la decisión y anunciar la interposición de un recurso de reposición para revocar el acuerdo plenario. Además, lanzaron que en caso de que no prospere están dispuestos a acudir a la vía judicial a través de un contencioso administrativo o incluso llevando ante la Fiscalía.

Cabrillo recordó que la contrata data de 1987 y que se ha prorrogado hasta en tres ocasiones, a la vez que consideró que esta renovación del acuerdo se trata del «mayor de los despropósitos contra el interés general de los benidormenses».

Gasent denunció el «atropello» y lamentó que dos partidos rivales históricos se unen por un solo interés. Amor criticó los «espurios intereses» y Bigorra censuró el paso dado sin un informe de la valoración del cumplimiento del contrato actual.

Por su parte, el portavoz del PP, José Ramón González de Zarate, recalcó la legalidad del acuerdo plenario y la edil de Contratación, Lourdes Caselles, recordó que «todos los informes del expediente favorables». Ambos matizaron que la prórroga es la única vía posible para la gestión mixta del servicio. En la misma línea, el portavoz del PSOE, Rubén Martínez, criticó el «populismo» de los minoritarios y aseguró que todavía está esperando que le presenten una propuesta alternativa a su moción para llegar a la creación de un ente mixto.