El Ayuntamiento de Benidorm autorizó el viernes tres paradas para las lanzaderas del AVE entre la estación de tren de Alicante y la ciudad. Dan respuesta así a la solicitud por parte de la empresa concesionaria de la línea, la Unión de Benisa, del grupo Alsa, tal y como relató el Consistorio en un comunicado. De esta manera, el edil de Movilidad y Transportes, José Ramón González de Zárate firmó la autorización para que el autobús recale en la ciudad, y se le notifique a la mercantil en los próximos días, según indicaron en el escrito. No obstante, hoy en día sigue siendo una incógnita la fecha de inicio de este servicio, que en un principio se barajaba para mediados de julio, pero que según fuentes municipales, el Consistorio «está trabajando para que lleguen antes de que acabe el mes».

En concreto, el Ayuntamiento da permiso para que las lanzaderas paren en tres puntos distintos de la localidad. En la Estación de autobuses, en la avenida Jaime I y en la vía Europa, estas últimas más cercanas al casco urbano y a la zona turística de Benidorm. Además, en Jaime I contemplan dos paradas, una en cada acera, a la altura de los números 25 y 48, donde ya se detienen otros autobuses de Alsa, como los que operan entre el municipio y Alicante.

La llegada de las ansiadas lanzaderas a la capital turística de la Costa Blanca lleva consigo la instalación de marquesinas en las paradas de la localidad. De Zárate indicó que tanto en la avenida Europa como en Jaime I van a proceder a colocar este mobiliario para identificar el servicio. Y según señaló, lo harán a «coste cero» para el Ayuntamiento, debido a que las asume la concesionaria del mobiliario urbano, Impursa, fuera del canon.

«Lista para recibir las lanzaderas»

Con todo ello, el edil de Movilidad valoró que «Benidorm ya está lista para recibir las lanzaderas del AVE. Esperamos su puesta en marcha sea viable de inmediato y que en las próximas semanas ya estén funcionando, para de esta forma facilitar los desplazamientos y la conexión entre la ciudad y Madrid». Además, se apoyó en los datos que baraja Renfe para recordar la importancia de este servicio para los viajeros que optan por el AVE con parada en Alicante y tienen como origen o destino Madrid.

Tres años de espera

Aunque aún no hay fecha de inicio, parece que las lanzaderas empiezan a ver la luz entre las dos localidades tras tres años de idas y venidas entre todas las partes implicadas. Un tira y afloja que se prolonga en el tiempo. Cabe recordar que el Ayuntamiento de Benidorm denunció en los últimos meses que le excluían de las reuniones que estaban manteniendo la estación de Adif con el Ayuntamiento de Alicante y el Consell. Encuentros a los que nunca ha acudido el Consistorio de Benidorm, tal y como afirmó el concejal de Movilidad, que ayer indicó a este diario que sólo había tenido contacto con Alsa.

El paso más importante hasta ahora se dio hace apenas un mes, cuando el Consell autorizó este servicio. En aquel momento detallaron que tendrían que aprovechar los viajes entre ambas localidades, para cuando coincidiera con la llegada del AVE, los autobuses se desplazaran hasta la estación de Adif. De esta manera, abría la puerta a la creación de una nueva parada en el servicio regular dentro del recinto ferroviario y desahogar el supuesto tráfico que podría generar detenerse fuera.

Diferentes alternativas

Pero para llegar hasta aquí, el Ayuntamiento de Benidorm buscó otras vías en su intento de atraer hasta la ciudad a estos pasajeros. Uno de las apuestas más importantes fue cuando habilitaron autobuses directos entre la estación de Villena y la de Benidorm, que terminó siendo un fracaso y eliminándose de las opciones para el Consistorio.

Ante esto, en marzo fue la iniciativa de una empresa local privada, Beniconnect, la que se lanzó a dar servicio a estos pasajeros de forma discrecional, es decir, venta por plaza. Por contra, tienen que decidir entre el taxi, desplazarse a la estación de autobuses de Alicante y 45 minutos de trayecto hasta Benidorm, o a la del Tram, con más de una hora de viaje.