La flota pesquera de Altea no pesca solamente peces. También limpia los fondos marinos al «capturar» todo tipo de residuos echados al mar por la negligencia de los humanos. La contaminación preocupa a los pescadores por el impacto negativo en el ecosistema. Ayer, las 12 barcas de arrastre de la flota alteana participaron en la jornada de concienciación sobre la contaminación del mar que organizaron conjuntamente la Cofradía de Pescadores de Altea y el Club Náutico, aprovechando que era el último día de pesca de arrastre antes de entrar en el paro biológico que realizarán en Altea durante el mes de junio.
La jornada consistió en la recogida de los residuos «capturados» en las redes durante la pesca y su depósito en el puerto para clasificarlos, separarlos en cajas y subastarlos posteriormente.
De la flota de arrastre, ayer recogieron basura las embarcaciones Isleta IV, Playa de Altea III, Isleta II, María y Miguel, Illeta d'Altea y Royal con un total de 70 kilos de latas de refresco y cerveza, plásticos de todo tipo, cuerdas, botes de pintura y ropa que se subastaron por un euro el kilo que abonó el Náutico de Altea para dárselo a los pescadores.
Según fuentes de la Cofradía, las barcas «pescan» una media de 25 kilos de basura por embarcación y día dependiendo de las corrientes marinas. Estos residuos se depositan en contenedores especiales que son vaciados semanalmente por una empresa de reciclaje.
Jornadas medioambientales
Por otro lado, el Club Náutico realizará durante junio sus XVI Jornadas Medioambientales, razón por la que la acción conjunta organizada ayer se hizo para «concienciar sobre la problemática de la contaminación marina y del impacto de la basura en el mar», según el gerente del club, Joaquim Such.