Las obras de remodelación del cruce de la calle Garganes con la avenida Rei Jaume I y la calle Raspall, que comenzaron en abril como parte del Plan de Obras Financieramente Sostenibles 2015 de la Diputación, están realizándose dentro de los plazos previstos y con el valor añadido de que se se están instalando en las aceras «un tipo de pavimento específico con una configuración de disposición determinada que hace viable el tránsito a los invidentes», según el concejal de Infraestructuras, Roque Ferrer, quien explicó que observó que en el proyecto «no estaban contemplados ciertos aspectos que favorecen la movilidad de los peatones», razón por la cual pidió esta mejora además de mantener el nivel de la acera por donde transcurre el itinerario de los peatones «y ejecutar las rampas de acceso a los pasos de cebra ocupando la calzada sin sobrepasar la zona de aparcamiento».