Cerca de un centenar de personas se concentraron ayer a las puertas del centro ocupacional y la residencia para personas con discapacidad Hoya del Río de la Fundación Relleu para protestar por el inminente cierre de esta institución, que da servicio a 24 personas con diversidad funcional de toda la provincia, tras la pérdida de la subvención anual que concedía la Generalitat para mantener las instalaciones y abonar los salarios de la plantilla. Lo hicieron sin saber que lo que se inició como una protesta acabaría en una celebración, después de que los representantes de los trabajadores recibieran la noticia que llevaban meses esperando.

La Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas -nueva denominación de Bienestar Social- ha garantizado una vía de financiación para que la Fundación Relleu pueda mantener su actividad hasta que se resuelva el concurso de acreedores en el que está actualmente el grupo Emaús, de quien depende este centro, y cuya deuda podría rondar los 20 millones. Así lo confirmaron ayer fuentes del sindicato Comisiones Obreras, que representa a los trabajadores en las negociaciones que se están llevando a cabo para asegurar el futuro del centro, y que ayer participaron en una reunión en Valencia con la secretaria autonómica de Servicios Sociales y Autonomía Personal y los administradores concursales. El anuncio llegó minutos después de que se iniciara la concentración y llenó de esperanza a los trabajadores y a los usuarios del Hoya del Río.

Vecinos de Relleu, el alcalde Santiago Cantó (PP) y otros representantes municipales, así como una representación de distintos colectivos de la dependencia de distintos puntos de la provincia participaron ayer en la concentración. Entre ellos, de la Union Provincial de Asociaciones Pro-minusválidos Psíquicos de Alicante (Upapsa), de la asociación Apsa y el centro Terramar de Alicante, del centro Gormaget de Alcoy, Maigmó de San Vicente, Les Talaies de La Vila o San Pascual de Ibi.

Los delegados sindicales de CC OO en la Fundación, Juan Antonio Llorens, y Ana Crespo, que participó en la reunión con la Conselleria, explicaron que el Consell facilitará a la Fundación Relleu recursos suficientes para mantener su actividad mientras se resuelve el proceso concursal, por lo que no se reubicará a ningún usuario en otros centros de la provincia ni los trabajadores se verán abocados a perder su empleo, como todo hacía prever hasta ayer mismo.

Cuatro meses de impagos

De ahí en adelante, se buscarán otras vías para la gestión del Hoya del Río y el resto de servicios ahora dependientes de Emaús, entre los que se baraja dejar el servicio en manos de otra empresa del sector, una opción que, según habrían trasladado los administradores concursales cada vez toma más fuerza y sería bien vista por el juez que instruye el proceso. Asimismo, los representantes de Comisiones Obreras confiaron en que esta vía de financiación permita paliar en el menor plazo de tiempo posible parte del retraso que acumulan los trabajadores en el pago de sus nóminas, que ahora alcanza los cuatro meses. Por último, destacaron que, de momento, todo el personal del centro «mantendrá sus empleos» y la Fundación Relleu, su actividad, por lo que «no arrastrará» al cierre a otros servicios de Emaús.