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Benidorm

El CSIF rechaza ahora el control de asistencia a los funcionarios

Lo tacha de «gasto innecesario», y afirma que ya lo hacen los jefes de departamento

El CSIF rechaza ahora el control de asistencia a los funcionarios

El anuncio del equipo de gobierno local popular de Benidorm sobre la puesta en marcha de un sistema para vigilar la entrada y salida de los empleados municipales de sus puestos de trabajo sigue generando reacciones. Así, después de que en la mañana del pasado jueves las principales fuerzas sindicales del Consistorio trasladaran de forma consensuada al ejecutivo municipal, durante la celebración de una mesa de negociación, la necesidad de confeccionar un reglamento sobre la asistencia de los empleados previo a la aplicación del mecanismo de control laboral, ahora el CSIF ha ido un paso más allá y ha pedido al gobierno local paralizar la medida al entender que es un «gasto innecesario», como expusieron ayer en una circular interna según pudo saber este diario.

Hay que tener en cuenta que el sistema que quiere aplicar el gobierno local se basa en la colocación de unos aparatos en los diferentes edificios municipales para controlar a través de la huella digital de los empleados públicos su asistencia. La medida tendrá un coste de cerca de 39.600 euros, aunque la partida habilitada para la misma se cifra en 45.000 euros.

Desde el CSIF consideran que las arcas locales deberían ahorrarse este desembolso que podría destinarse a otras cuestiones como la Valoración de los Puestos de Trabajo (VPT). Un estudio en el que está inmerso el actual equipo de gobierno y que permitiría reubicar a los empleados municipales para optimizar la gestión en el ente local. Asimismo, el representante del CSIF, Antonio Ferrer, cargó contra la iniciativa al apuntar que no existe un reglamento previo que regule la asistencia de los funcionarios. «Cada departamento tiene un horario diferente y primero habría que realizar un análisis sobre la eficacia de un mismo sistema de control para todas las áreas», consideró Ferrer.

Por ello, el representante del CSIF pidió ayer paralizar la aplicación de la medida, al menos hasta que se haga una normativa previa sobre la asistencia de los trabajadores. Además, Ferrer también consideró que «para controlar la entrada y salida de los funcionarios ya están los jefes de cada departamento».

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