El mundo fallero de Benidorm ha quedado huérfano por la muerte de uno de sus festeros más veteranos. Lucio García García, fundador y presidente de honor a perpetuidad de la Falla Rincón de Loix, falleció la madrugada de ayer a los 74 años, tras una larga enfermedad. Su pérdida conmocionó a los falleros de la ciudad, especialmente de su comisión, de la que era un miembro muy activo, y al barrio del Rincón, donde vivía y al que estuvo muy vinculado.

Nacido en Chaherrero (Ávila) a principios de los años 40, llevaba cerca de medio siglo afincado en Benidorm, lugar en el que tendió grandes lazos personales y familiares que le hicieron una persona muy querida. Pese a no tener raíces valencianas, en 1978 se unió a un grupo de vecinos del barrio para crear una fiesta que sirviera como atractivo para los negocios y el pequeño comercio. Con esta iniciativa se acabó gestando la Falla del Rincón, fiesta que amó y a la que contagió su alegría y sentido del humor.

El pasado marzo, pese a que se encontraba ya decaído por la enfermedad, Lucio García vivió y disfrutó de las fiestas josefinas y pudo ver cumplido el sueño de ver a su nieta, Tania Rico, lucir la banda de fallera mayor del este distrito.

Decenas de personas se acercaron ayer al Tanatorio Marina Baixa para arropar a su familia. Allí se celebrará hoy, a las 12 horas, la misa funeral.