Hace muchos años, siendo alcalde de mi pueblo, La Vila, vino a verme Pedro López (el de Valor), acompañado de Antonio Galiana (por aquellas fechas gerente de la empresa), planteándome la necesidad de la ampliación de la fábrica de chocolates.

El Plan General Urbanístico de nuestro pueblo (PGOU), no contemplaba la posibilidad de la ampliación que pretendían.

Los argumentos de Pedro López fueron tan convincentes que inmediatamente nos pusimos manos a la obra para conseguir que la planificación urbanística permitiese que la actual fábrica de Valor se realizase.

Tampoco tiene mayor importancia el asunto, considerando que los dirigentes políticos tienen la obligación y responsabilidad de conseguir lo mejor para su pueblo.

Aquella fábrica empezó a construirse y, lógicamente, finalizó, y pues, también lógicamente tendría que inaugurarse.

No recuerdo exactamente las fechas, pero sí que se, no siendo ya alcalde de La Vila , y estando de viaje fuera de España, mi madre ,con la que me comunicaba a diario (mis hijos eran muy pequeños y no habían móviles entonces), me dijo que me había llamado Pedro López y que quería hablar conmigo.

Me preocupé por el tema y llamé a Pedro. Simplemente me comentó que iban a inaugurar la fábrica y que le gustaría que estuviese. Y quería adaptar el horario del protocolo a mi llegada al aeropuerto.

Llegué al aeropuerto y me fui a la fábrica de Chocolates Valor, asistiendo a su inauguración.

Es una pincelada de quien era Pedro López. Nada más

Gracias Pedro.