El Ayuntamiento de Benidorm redujo su deuda viva en 21 millones de euros durante 2015, según se desprende del documento de liquidación del presupuesto del pasado ejercicio que dio a conocer ayer la edil de Hacienda, Lourdes Caselles, fijándose en 78 millones. La importante bajada se debe, en gran medida, a los ajustes aplicados en los gastos corrientes del Consistorio. De hecho, para este capítulo de las cuentas se había presupuestado un montante total de 35 millones pero finalmente se han consumido 29 millones. Seis menos de lo que estaba planeado. «Hemos cumplido nuestro objetivo de hacer más con menos», valoró la edil popular.

Asimismo, la concejal destacó que el aumento de la previsión de ingresos, que prácticamente se ha duplicado pasando de 560.000 euros a algo más de un millón, también ha permitido rebajar el alto volumen de deuda. Hay que tener en cuenta que al cierre de 2014 la cifra que el Consistorio debía a entidades bancarias rondaba los cien millones de euros.

«La mejora de los ingresos previstos vinculada a la reactivación de la actividad inmobiliaria ha propiciado que la recaudación por el Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) casi se haya duplicado», recalcó la concejal de Hacienda. Este aumento de los ingresos también se ha dejado sentir en las tasas, ya que se han ingresado 29 millones por este concepto en lugar de los 25 previstos.

La reducción de la deuda municipal en 21 millones deja el nivel de endeudamiento del Consistorio en un 86%. Un porcentaje que todavía es necesario rebajar ya que la ley obliga a las administraciones locales a pedir autorización para concertar cualquier operación de crédito si este porcentaje se encuentra entre el 110 y el 75%.

Por otra parte, cabe destacar que el Ayuntamiento de Benidorm cerró el ejercicio 2015 con 7,7 millones de euros de resultado presupuestario positivo. Esta cantidad se destinará a liquidar el pago de la deuda, tal y como indica la legislación vigente. Con todo,

Caselles se mostró optimista al apuntar que su intención es destinar casi el doble, 15 millones, a reducir la deuda. Un hecho que permitiría rebajar los niveles de endeudamiento por debajo del 75% y, de esta forma, el Consistorio no tendría que pedir permiso al Ministerio de Economía y Hacienda para nuevos créditos a partir del próximo ejercicio.

Pago a proveedores

Además, en la liquidación del presupuesto fija el plazo medio de pago a proveedores del Ayuntamiento durante el pasado ejercicio en 13 días a pesar de que la ley establece como periodo máximo un mes. «Es gracias al trabajo del área de Intervención. Nos tenemos que sentir muy orgullosos, zanjó la edil Lourdes Caselles.