Una profunda transformación del mercadillo medieval de Benidorm para atraer nuevos consumidores a la capital de la Costa Blanca y consolidar la cita como un referente turístico entre este tipo de ofertas que cada día suma nuevos adeptos. Esta es la intención de la Asociación Independiente de Comerciantes de Benidorm (Aico) desde la que ya trabajan para potenciar el evento y, de esta forma, aumentar sus ventas durante la celebración del mismo. Una acción en línea con las iniciativas que viene desarrollando la nueva directiva de la entidad -renovada hace un año- para «hacer más atractiva y viva la ciudad».
La renovación del evento pasa hasta por el cambio de nombre. Así, la cita pasará a denominarse «Benidorm medieval». Aico quiere llevar a cada rincón de la ciudad el ambiente propio de este tipo de festivales. Para ello, trabajan en una amplia remodelación del mercadillo que permita integrar al comercio y la hostelería en la celebración y conseguir trasladar a vecinos y visitantes a la Edad Media.
Hasta ahora, el mercadillo medieval de Benidorm se celebraba como complemento al acto histórico de la Carta Pobla en el que la ciudad conmemora el aniversario de su otorgamiento por el Almirante Bernat de Sarrià. Un documento mediante el cual Benidorm pudo constituirse como pueblo adquiriendo derechos de los que hasta entonces carecía. Esta efeméride tiene lugar el 7 de mayo y este año no coincidirá con la celebración de la feria, que arrancará unos días más tarde, a partir del jueves 11 de mayo, para coincidir con el fin de semana. Con todo, la empresa encargada de la organización del mercadillo realizará algún acto, todavía por concretar, para acompañar las celebraciones por la Carta Pobla.
Puntos de venta
Entre las novedades introducidas este año se encuentra la ampliación del número de puestos en el Parque de Elche de Benidorm. Así se triplicarán los puntos de venta con respecto al año anterior, pasando de algo más de una treintena de casetas hasta el centenar con el que se espera contar en esta edición. Pero ahí no queda la cosa. En esta ocasión se habilitará una zona de juegos infantiles en la calle Gambo y adyacentes, además de la organización de espectáculos y actividades por diferentes zonas de la ciudad para mantener el ambiente medieval. Para esta tarea, ha sido fundamental la colaboración con otras asociaciones de la localidad, así como con el Ayuntamiento. «Hemos integrado a todo el tejido empresarial en la celebración del evento», destacó el presidente de Aico, Raúl Parra.
Así las cosas, tando desde Ociobal, que representa a los locales de ocio nocturno, como desde Abreca, que agrupa a los hosteleros, también aportarán su granito de arena para hacer más grande la celebración. «La zona gastronómica del evento van a ser los propios establecimientos de la ciudad», indicó Parra, quien avanzó que se impondrá una decoración similar en todos los locales para atraer al público asistente.
El presupuesto del «Benidorm Medieval» alcanza los 70.000 euros. El mayor desembolso lo realizará la empresa organizadora del evento con 55.000 euros, mientras que el Ayuntamiento desde el área de Comercio aportará 10.000 frente a los 3.000 de Aico y los 2.000 procedentes de la partida del área de Participación para el comercio local.
Teresa Costa Hernández
