La fuente-rotonda del cruce entre las calles Garganes y Raspall, al final de la avenida Rei Jaume I, será eliminada definitivamente por las obras de reurbanización de la calle Garganes y el cruce con la calle Raspall que consistirán en el asfaltado de la calle, la reordenación del tráfico, la ampliación de las zonas de jardín, la ampliación de aceras y el aumento de la batería de contenedores soterrados. La fuente la instaló el gobierno del PP en 2002 sobre una plataforma móvil para poder quitarla cuando se celebran las entradas mora y cristiana de las fiestas patronales. Las obras se iniciarán la próxima semana y tendrán una duración de tres meses.

El coste de las mismas asciende a 200.000 euros, financiados por la Diputación, según desveló ayer el diputado provincial de Planes de Mejoras a Municipios, Bernabé Cano, tras una reunión mantenida con el alcalde de Altea, Jaume Llinares, para firmar el acta de comprobación del replanteo de las obras.

El alcalde destacó la conexión entre la avenida Jaume I y la Plaça dels Esports «que será más directa y fácil de transitar».