«Cerrado por falta de personal». Así podría rezar, si lo hubiera, un cartel a las puertas de la vivienda del Hort de Colón, en pleno centro de la ciudad y reconvertida por el Ayuntamiento de Benidorm en museo, pero que desde hace meses está de nuevo cerrado a cal y canto. Otra vez más.
El área municipal de Cultura se ha visto obligada a posponer una exposición con la que tenía previsto reabrir este espacio público, que también alberga parte del antiguo museo naval de Benidorm, al carecer de conserjes para hacerse cargo de abrir y cerrar diariamente sus puertas y custodiar las instalaciones. Así lo reconoció ayer la edil Ana Pellicer, quien indicó que su concejalía confía en poder reparar esta situación «cuanto antes», pero siempre y cuando «podamos prestar un servicio en condiciones, respetando los horarios y los días de apertura y no abriendo un día sí y cuatro no porque no tenemos personal». Y ahí está el problema.
Hasta la fecha, las pocas veces que este museo ha estado dando servicio más o menos continuado lo ha hecho por medio, principalmente, de dos vías: por un lado, «tirando» de personal contratado a través del convenio ocupacional del Servef para dar trabajo a desempleados; por otro, confiando el servicio a una empresa externa para desarrollar distintas actividades, como ocurrió el pasado verano, cuando se contrató un servicio de ludoteca y animación infantil que permitió reabrir L'Hort de Colón después de dos años clausurado.
La edil de Cultura explicó que su departamento está a la espera de que se actualice parte del convenio con el Servef para poder disponer de conserjes. Y manifestó que su esperanza es que sea «lo antes posible», dado que la concejalía tiene múltiples actividades programadas para desarrollar en este espacio.
La más inminente, la exposición de Tomás Orts-Ramos que debía estar ahora montada y que se ha tenido que posponer. Y a partir de los meses de mayo o junio, las visitas guiadas a la casa, que se realizarán con dos vertientes: las más sencillas, de las que se encargará el personal de la concejalía, para dar a conocer este inmueble del siglo XIX y que es uno de los pocos de aquella época que se conserva en la ciudad; y las visitas teatralizadas, a cargo de la asociación Marina Histórica, que comenzaron a desarrollarse el pasado verano y cosecharon gran éxito. Pellicer explicó que para estas últimas, la idea de su concejalía es, primero, retomar el guión y los personajes del año pasado para atender al público que quedó inscrito en lista de espera y, una vez que se haya cubierto esta lista, poner en escena un nuevo guión, que dé continuidad al primero, y en el que intervendrán nuevos personajes.
