La Fiscalía de Benidorm ha acordado el archivo de la investigación abierta para esclarecer las circunstancias del suicidio de un turista británico en los calabozos de la Comisaría de la Policía Nacional en Benidorm. Así lo confirmaron ayer fuentes del Ministerio Fiscal, que señalaron que no se ha apreciado una posible negligencia en la custodia policial del detenido. Estas mismas fuentes confirmaron que la causa se estaba investigando por dos vías paralelas, ya que además de la Fiscalía también un juez de la ciudad había abierto diligencias para esclarecer los hechos, y apuntaron que el juzgado también ha acabado dictando el archivo de las diligencias al llegar a las mismas conclusiones.

Los hechos tuvieron lugar el pasado mes de octubre, cuando un turista británico se ahorcó de madrugada en el interior de la celda en la que estaba detenido después de que, presuntamente, agrediera a su pareja sentimental. Según la versión policial, la mujer había llamado a la centralita del hotel en el que se hospedaban junto a sus hijos y solicitó que la ayudaran porque su pareja estaba agresiva. En el momento de la detención, al parecer, el hombre estaba ebrio y mantuvo una actitud violenta hacia los agentes.

Tras ser trasladado a la Comisaría, y una vez que se realizaron los trámites oportunos de la detención, se le encerró en uno de los calabozos de este edificio. Según los datos de la Policía, un cuarto de hora después, en un control rutinario, se descubrió que el detenido había rasgado una manta y la había enganchado a las rejas para ahorcarse.

A raíz de estos hechos, el Observatorio de la Ciudadanía contra la Corrupción interpuso una denuncia en la que alertaban de que las instalaciones policiales podrían carecer de los necesarios elementos de seguridad para evitar el suicidio del arrestado. Fuentes de la Fiscalía confirmaron ayer que la investigación ha descartado que las irregularidades denunciadas guardaran relación causa-efecto con la muerte de esta persona.