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Benidorm cambia el bikini por el uniforme de obrero

Todos los barrios de la ciudad están de reformas con fibra óptica, arreglos de calles o asfaltado

Benidorm cambia el bikini por el uniforme de obrero

El sonido de la radial es la banda sonora de Benidorm cuando llega el invierno. Decenas de obras invaden las calles de la ciudad para renovar aceras, asfalto o remodelar viales enteros... y ningún barrio se libra. Por ello, no es difícil que un vecino o turista que pasee por la localidad se vea en la obligación de tener que desviarse de su camino o cruzar de acera y dar más vueltas que antes para llegar a su destino. Algo que con frecuencia pasa en la zona centro y Foietes, área donde más reformas se concentran en la actualidad.

La remodelación de la avenida Jaime I mantiene cortado al tráfico un tramo de la misma, aunque el edil de Obras, José Ramón González de Zárate, indicó que está previsto que en los próximos días se reabra. También están mejorando la calidad del suministro eléctrico en la calle Limones y alrededores. En el cruce con Beniardá están rebajando la altura de las isletas para mejorar la accesibilidad de los carritos y sillas de ruedas de los cientos de peatones que cada día cruzan esta zona.

Unas obras que están creando confusión, sobre todo los primeros días, tanto en conductores como en peatones puesto que se les ha cambiado la dirección por la que tienen que pasar. Y no para crear una rotonda, como especificó el edil concejal de Obras. Sin ir más lejos, a escasos metros, montañas y montañas de tierra se remueven al día para crear el parque de Foietes, que ha tenido que desplazar el mercadillo de cada miércoles.

En la Cala esta semana han inaugurado su parque público y están en ejecución unas pistas de deporte. En el Rincón de Loix se han acometido mejoras en la accesibilidad de las calles. Mientras que en el Salto del Agua están realizando los accesos al Palau d'Esports l'Illa. En el Casco Antiguo las obras se centran en las del gas natural sin grandes proyectos como los mencionados. Pero sí que los hay por parte de las empresas privadas, sobre todo hoteles y comercios, que aprovechan la temporada baja para la restauración de sus negocios. Esto mismo ocurre por ejemplo en la calle Gambo y Martínez Alejos, epicentro del tejido comercial, o en Ruzafa.

Canalizaciones de cinco tipos

Además de las mejoras del suministro eléctrico, también están abriendo el suelo de Benidorm para la introducción de gas natural y la fibra óptica de tres compañías distintas. Éstas canalizaciones afectan a todos los barrios de la localidad.

Pero según los datos que ofreció la concejalía de Obras a este diario, el uniforme de obrero se va a combinar con el del bikini en los próximos meses, cuando el calor empiece a apretar de nuevo. Y es que aún están pendiente de ejecución por diferentes puntos de la ciudad la mejora del pasaje Marconi, un tramo de la avenida Orts Llorca o la creación del espacio que albergará los biohuertos de Els Tolls.

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