El lunes comenzarán las obras de adecuación del cruce semafórico situado entre las avenidas Beniardá, Jaime I, Tomás Ortuño y Alfonso Puchades, y con las que se va a conseguir que este punto de importante tránsito peatonal y de vehículos sea totalmente accesible, según informó ayer el Ayuntamiento de Benidorm.

Para ello se van a demoler las isletas actuales que se encuentran en altura para ser sustituidas por otras a nivel de asfalto en esta intersección conocida popularmente como El Cruce. El edil de Obras, José Ramón González de Zárate, explicó que con el cambio «las sillas de ruedas y los carritos podrán transitar sin necesidad de esquivar las isletas, logrando una accesibilidad total y continua, y también más seguridad». Asimismo, se beneficiarán de este cambio los peatones de más edad, puesto que no tendrán que salvar la altura de las isletas.

El concejal indicó que esta adecuación está incluida dentro del proyecto de remodelación de la avenida de Jaime I, se ejecutará en aproximadamente dos semanas y recoge la prolongación del carril-bici, que llegará hasta este punto. De Zárate especificó que mientras se desarrolle la obra los vehículos podrán seguir circulando por la zona, pero estará cerrado para peatones.