El Ayuntamiento de Benidorm cobrará un canon de 0,50 euros por entrada a todos los grandes eventos que se celebren las instalaciones de la Ciutat Esportiva Guillermo Amor de Foietes, el auditorio Julio Iglesias del parque de l'Aigüera o en la plaza de toros.
El portavoz del gobierno, José Ramón González de Zárate, ha explicado este lunes, en rueda de prensa, que esta modificación de la ordenanza fiscal ha sido tratada en la comisión informativa de esta misma mañana y que se elevará a pleno en la próxima sesión ordinaria de 28 de diciembre.
El canon deberá ser adelantado en un 50 por ciento, antes de la celebración del evento, como garantía, y el resto se entregará una vez finalizado.
De esta forma el gobierno pretende evitar que las suspensiones reporten una imagen negativa para la ciudad. "Esta tasa funcionara como un aval y si el evento se suspende ese adelanto se lo queda el Ayuntamiento por daños y perjuicios a la ciudad", ha explicado.
Para calcular el canon el Ayuntamiento tomará como muestra el aforo aproximado que el empresario presente ante Conselleria para tramitar los permisos y se le reclamará que adelante la mitad de esos 0,50 euros por entrada.
Una vez celebrado el evento se realizará una autoliquidación para ajustar la tasa al resultado real de la venta de entradas y proceder al cobro del resto del canon o a la devolución de la parte proporcional si fuera el caso.
El canon se cobrará para eventos privados que se celebren en estos tres espacios públicos, aunque quedan exentos otros puntos como el Salón de Actos del Ayuntamiento o el auditorio Oscar Esplà. Además según el gobierno tampoco deberán abonar canon las asociaciones locales que celebren sus actos propios o eventos de corte benéfico. En estos casos el Consistorio seguirá cediendo las instalaciones sin coste alguno.
Para el gobierno, se trata de una "modificación a la baja" de la anterior ordenanza para aplicarla con "datos reales". González de Zárate ha apuntado que hasta ahora la normativa establecía un pago de 230 euros por hora de utilización de la instalación, lo cual en eventos como el Low Festival que necesita de 20 días de montaje y desmontaje "hacía inviable que cualquier el pago y que cualquier empresario se planteara hacer un evento en Benidorm el Ayuntamiento terminaba por no cobrar nunca esa tasa".
