Siete horas atrincherado en su vivienda para evitar su internamiento en un centro psiquiátrico. Un hombre de unos 40 años de edad mantuvo toda la tarde de ayer en vilo a la Policía Nacional y a los vecinos de un edificio ubicado en la calle Islandia de Benidorm. Se trata de la segunda vez en la que ocurre este hecho. La primera fue en el verano de 2013, aunque en esa ocasión, iba armado con un cuchillo y una barra de hierro, tal y como detalló este diario en aquel momento. Esta vez, según fuentes cercanas al caso, no portaba ningún arma.

Los hechos ayer se iniciaron alrededor de las tres de la tarde, que fue cuando los efectivos policiales se desplazaron hasta el lugar. Y no fue hasta pasadas las diez de la noche cuando el afectado fue reducido por los agentes y trasladado en ambulancia a un centro hospitalario, ya que tal y como comentaron las mismas fuentes, había una orden del médico para su internamiento.

La fuerzas de seguridad montaron el dispositivo para estos casos y trataron de negociar con él sin éxito. La Policía Nacional contó con el apoyo de sus compañeros del Grupo de Operaciones Especiales (GOE), desplazados desde Valencia. La magnitud del operativo, según dichas fuentes, se desplegó ante la posibilidad de que esta persona pudiera volver a estar armada, teniendo en cuenta el antecedente, aunque luego se comprobó que no. Tras la llegada del juez alrededor de las 21.00 horas, la intervención de los agentes permitió reducirlo sin que hubiera mayores consecuencias. Para ello, tuvieron que entrar en su domicilio armados y protegidos.