Una agresión grave a un taiwanés, una paliza a un británico que se enfrentó con cinco personas que trataron de robarle en la calle Mallorca, una reyerta entre ciudadanos colombianos y africanos en un inmueble del Rincón de Loix que se saldó con dos heridos y un fallecido. Todos estos hechos han acontecido en menos de siete días en Benidorm. Coinciden además con las reclamaciones realizadas por diferentes colectivos sociales, en la última semana, de más medidas de seguridad en ciertos puntos de esta localidad turística. Tanto a través de propuestas individuales de cara a los presupuestos participativos como en una pequeña concentración que se realizó el lunes frente al Ayuntamiento.
En el equipo de gobierno del Consistorio benidormense han saltado las alarmas sobre un asunto que ya venían abordando con las diferentes fuerzas de seguridad que trabajan en Benidorm desde hace semanas. El concejal de esta área, Lorenzo Martínez, indicó a este diario que, tras todo el revuelo que se ha generado sobre el tema de la delincuencia, tienen previsto aumentar la presencia policial en los puntos de la ciudad con más volumen de turistas y en los que detectan más conductas delictivas o vandálicas, como es la zona inglesa o el Rincón de Loix.
El objetivo, según este edil, no es otro que incrementar la percepción de seguridad por parte de todos esos visitantes que se alojan en esta área, en su mayoría británicos. No obstante, Martínez matizó que no es algo que solo se hayan planteado después de estos sucesos. «Llevamos trabajando desde hace tiempo en un plan de reestructuración de la plantilla policial con el fin de que haya más gente trabajando en la calle. El 70% de los agentes de la Local, actualmente, desempeñan servicios de tráfico y de vigilancia de colegios. Queremos replantear todo para reforzar esos puntos conflictivos con una presencia estática, que es lo que demanda la ciudadanía», detalló el edil, a la vez que apuntilló que estas modificaciones se verán beneficiadas por la incorporación de 20 policías prevista para 2016.
El concejal recordó que hace poco más de una semana los diferentes mandos de las fuerzas de seguridad tuvieron una reunión con el fin de mejorar la coordinación entre ellos. También mantuvieron un encuentro con la Fiscalía con el objetivo de ver cómo actuar ante determinados actos delictivos, como el trile, los robos o la prostitución. «Pienso que más que un problema de inseguridad, es que hay ciertos delitos menores que quedan impunes y eso genera frustración tanto al ciudadano como a los propios agentes. Ésa es nuestra verdadera asignatura pendiente», detalló.
El alcalde de Benidorm, Toni Pérez, quiso remarcar que los tres hechos acontecidos en Benidorm en los últimos días son «totalmente puntuales». También incidió en que «desde el minuto uno en el que entramos a gobernar nos pusimos a trabajar a este respecto, porque éramos conocedores, ya en la oposición, de este tipo de problemáticas en ciertas áreas de la ciudad. Por ejemplo, llevamos tiempo planteando el traslado del SATE a la zona del Rincón».
Las cifras de delitos
El primer edil Toni Pérez quiso subrayar también que los datos objetivos «indican, a fin de cuentas, que Benidorm es una ciudad segura, con independencia de ciertos asuntos que debamos corregir».
Fuentes de la Comisaría aseguraron que un último informe del Ministerio del Interior se apunta a que la mayoría de delitos, en esta localidad, han ido a la baja en el último año. Por ejemplo, los robos con violencia e intimidación se han reducido a 145, frente a los 184 que se registraron en 2014 y los 376 en 2012. Los hurtos de 3.3391 a 3.327. Y los delitos y faltas de 6.363 a 5.995.
Desde la Policía Local apuntaron que en 2013 realizaron 176 detenciones por actos delictivos, en 2014 se redujo esta cifra a 142 y en 2015, en lo que va de año, llevan alrededor de 140, «lo que podría suponer, a final de año, un ligero incremento, pero tampoco preocupante».
Algunos medios de comunicación hacían alusión a un informe de Interior, en el que se afirmaba que Benidorm tenían una alta tasa de criminalidad. Fuentes de la Policía Nacional indicaron que se trata de una puntualización alarmista, puesto que esta tasa se calcula en función del número de habitantes, «y en esta ciudad todos sabemos que los censados son muchos menos de los que hay debido al turismo, que multiplica hasta por cuatro el número de personas concentradas».
