Benidorm redobla sus esfuerzos contra las excursiones turísticas ilegales. La Asociación de Agencias de Viaje (Avibe), en colaboración con el Ayuntamiento de Benidorm y el turoperador Mundosenior, van a poner en marcha la campaña «Excursiones turísticas con seguridad», en la que, además de informar sobre las ventajas de las excursiones legales ofrecidas por empresas del sector, alertarán a los turistas sobre los riesgos de las excursiones ilegales que ofrecen en la vía pública los denominados «manteros».

Esta campaña cuenta con la colaboración de la concejalía de Seguridad Ciudadana de Benidorm, el Patronato de Turismo Costa Blanca y la Agencia Valenciana de Turismo, y fue ayer presentada por el edil de Seguridad, Lorenzo Martínez; el presidente de Avibe, Antón Luthi; y el responsable de Mundosenior en Levante, Tomás Mere.

Luthi señaló que la campaña se desarrollará en castellano e inglés en prensa, en redes sociales, en comercios y hoteles, y también a pie de calle en Benidorm, sobre todo entre los turistas españoles, principales objetivos de estas excursiones. De ahí que Mundosenior vaya a repartir los folletos de la campaña entre «todos los usuarios del Imserso», apuntó su responsable.

El presidente de Avibe incidió en que esas excursiones ilegales «no contemplan seguro para los usuarios en caso de accidente, ni usan guías habilitados», y «la gran mayoría» de los captadores -que «contravienen las ordenanzas municipales»- «no están dados de alta en la Seguridad Social ni en Trabajo». Además, al finalizar la excursión, «llevan a los turistas a naves industriales, muchas de ellas sin estar dadas de alta, y les venden productos como colchones y mantas a un precio superior al de mercado».

Luthi y Mere han coincidido con el concejal en que esta práctica «perjudica la imagen de Benidorm» y en que para combatirla y erradicarla es necesaria «que se involucren todas las administraciones». En este sentido, Martínez recordó que la ordenanza municipal sanciona con 300 euros a quienes reparten publicidad de estas excursiones y con hasta 1.200 a las empresas que hay detrás de estos captadores.

En la actualidad, esta captación de clientes «no es un delito, sino una falta administrativa» y de ahí que sólo pueda sancionarse económicamente. En cualquier caso, cuando la Policía Local detecta a un «mantero» da parte a la Inspección de Trabajo «para que investigue su situación laboral», aunque no siempre es posible cobrar la sanción dado que muchos no están dados de alta o «no tienen recursos» para hacer frente a las multas».