Los dos pantanos de la Marina Baixa, el del Amadorio y el de Guadalest, han incrementado el agua embalsada en 2,61 hectómetros cúbicos en el último mes gracias a los episodios de lluvias ocurridos en estas fechas. Ese dato supone más de la mitad de los cinco hectómetros que fueron trasvasados antes del verano desde el Tajo para paliar la situación de emergencia y garantizar el suministro en temporada alta.

Según los datos de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), el volumen embalsado en el Amadorio es de 3,01 hectómetros cúbicos, lo que representa el 19 por ciento de su capacidad total, que asciende a 15,83 hectómetros.

En el caso del embalse de Guadalest, el agua embalsada llega a los 3,37 hectómetros, un 25,9 por ciento del total de los 12,99 de su capacidad.

Por lo que respecta al último mes, el pantano del Amadorio ha pasado de 1,07 a 3,01 hectómetros, mientras que el de Guadalest ha incrementado su volumen de 2,68 a 3,35. No obstante, se prevé que durante los próximos días sigan llegando aportaciones procedentes de la montaña así como de nuevas lluvias previstas a partir del lunes.

Estas cifras indican, asimismo, que en la actualidad hay más agua embalsada en ambos pantanos que en 2014. Los datos de la CHJ señalan que hay almacenados 6,3 hectómetros frente a los 5,5 que había el año pasado. Sin embargo, esos registros están lejos de los que había en 2012 (15,9 hm3) o en 2013 (12,8 hm3).