La imagen del copatron de La Nucía volvió ayer a la ermita a ritmo de traca por las empinadas calles del municipio, llevado en volandas por costaleros. Cientos de personas acompañaron a Sant Rafel corriendo desde la Iglesia hasta la Capelleta. Este tradicional acto, junto a la mascletà, pusieron fin a las Fiestas de Santíssim Sacrament i Sant Rafel 2015, iniciadas el pasado viernes.