El Consejo Vecinal considera que los presupuestos participativos, que se estrenarán en las cuentas municipales de 2016, reforzarán las inversiones en escena urbana por parte del Ayuntamiento. Además, según el vicepresidente del Consejo, Fernando Montes, lo harán de una manera «que puede interesarle mucho más al ciudadano de a pie», ya que, «las propuestas no estarán tan sujetas a criterios políticos o electoralistas, sino que apostarán por cambiar lo que realmente le interesa al vecino de cada barrio», dijo a este diario. Montes prevé que muchas de las peticiones vecinales que van a recoger irán en la línea de solucionar pequeños desperfectos de cada barrio, «y no sobre macroproyectos, que es lo que más suele preocupar más a los dirigentes públicos», apostilló.

El Consejo Vecinal presentó ayer en el Ayuntamiento de Benidorm los pasos que van a seguir para introducir en los presupuestos de 2016 esta nueva fórmula participativa. Lo hizo junto a la concejal de Participación Ciudadana, María Jesús Pinto, que animó a todos los vecinos de Benidorm a que introduzcan sus propuestas en las urnas instaladas en las extensiones administrativas y el propio Consistorio, con los pertinentes impresos que se deben cumplimentar.

Cualquier persona mayor de edad y censada en Benidorm podrá, hasta el próximo día 24, presentar sus propuestas, que serán votadas en la asamblea del Consejo Vecinal prevista para el 27 de noviembre en el Centro Social José Llorca Llinares.

De todas estas iniciativas que se propongan, se seleccionarán 24 (una por cada área municipal), que pasarán por una serie de filtros técnicos y económicos que estudiarán su viabilidad y su prioridad, en base a unos criterios marcados en el reglamento que se ha elaborado sobre los presupuestos participativos. Estos baremos tendrán en cuenta a cuánta gente beneficia la medida, si ayuda a sectores más desfavorecidos, etcétera.

Los presupuestos participativos contarán con el 5% de la partida de inversiones como mínimo, según Montes. Tomando como referencia las cuentas del año pasado, se destinarían alrededor de 40.000 euros. «Todo depende ya de la voluntad política del equipo de gobierno», reseñó el vicepresidente del Consejo Vecinal.

La concejal, María Jesús Pinto, no pudo concretar si aumentarán más o menos ese porcentaje, «todo irá en función de cuánto se destine finalmente al apartado de inversiones», argumentó.

Fernando Montes insistió en el espíritu de estos presupuestos colaborativos, de los que ya existen experiencias en otros municipios de la provincia y de otras comunidades. «Para que lo entienda la gente, en estos presupuestos se van a recoger propuestas como la de esos abuelos de un barrio determinado que no dejan de reclamar un banco más en la plaza a la que acuden a sentarse cada tarde, en vez de que les instalen cinco semáforos junto a su casa que a ellos ni les va ni les viene. En definitiva, van a reflejar el sentir ciudadano. Sus pequeñas necesidades. Muchos vecinos sólo se acuerdan una vez al año del Centro Cultural que está sin acabar pero sí de la baldosa con la que se tropiezan cada vez que salen a la calle», dijo el vicepresidente.