Las obras de restauración del puente de hierro del «trenet» sobre el río Algar están generando contaminación acústica y riesgo de lesiones respiratorias, según denunciaron ayer desde el grupo municipal del PP de Altea. Así las cosas, los populares presentaron ayer un escrito ante el Ayuntamiento solicitando «la paralización y estudio de riesgo para la salud de las obras de restauración de las vías del tren».

Según el portavoz popular, Pedro Barber, desde el recinto donde se realizan las obras, ubicado en la plaza del Mercadillo junto al polideportivo municipal, sale «una columna continua de residuos que contienen en suspensión en el aire restos de arena, óxido y pintura, contaminantes que está demostrado que pueden provocar lesiones respiratorias y dar lugar a enfermedades más graves». Barber añadió que la contaminación también es acústica «con niveles superiores a los 90 decibelios que afectan a la salud de los vecinos y a los alumnos del cercano colegio Garganes», y aseveró que al equipo de gobierno «parece no importarle la preocupación de los residentes y padres de niños que acuden al polideportivo y al colegio a pesar de que hemos advertido que la zona del mercadillo no es idónea por encontrarse cercana a instalaciones deportivas, educativas y gran número de viviendas».

El concejal de Infraestructuras, Roque Ferrer, señaló que el viernes paralizaron las obras «consistentes en eliminar la pintura del mismo con arena a presión». Ferrer dijo que han exigido a la empresa que instale una carpa con filtros adecuados «para evitar la salida al exterior de las partículas contaminantes y el sonido de las maquinarias».