La Asociación Profesional de Guías Turísticos en la Comunidad Valenciana (AGUITUR) reclamó ayer, tras una asamblea en Benidorm en el Instituto Valenciano de las Tecnologías Turísticas (Invat.tur), que las administraciones públicas y los principales touroperadores apuesten por modelos de turismo como el cultural, el gastronómico o el deportivo, «lo que permitiría, en zonas como la de Benidorm y sus alrededores, desestacionalizar la demanda turística, al salirnos del modelo de sol y playa», precisó Jordi Linares, presidente de esta agrupación.
Linares consideró que tanto Benidorm como el resto de la comarca tienen potencial para ofrecer este tipo de turismo: cascos antiguos, parques naturales cercanos, ciudades con interesantes tradiciones a menos de una hora. Una oferta que, según el presidente de AGUITUR, beneficiaría al atraer a un turismo de «más calidad» y mejoraría la labor de su gremio. Según varios miembros de AGUITUR, existe un modelo que «perjudica seriamente a los guías turísticos profesionalizados, ya que suele potenciar el intrusismo de guías no oficiales que ofrecen pequeñas excursiones solo para vender productos». Emilio Cano, que lleva trabajando en esta pofesión muchos años en la capital turística de la Costa Blanca, opina que «el tipo de turista que se potencia en Benidorm no busca calidad».
Este colectivo reclama a las diferentes administraciones públicas que hagan esfuerzos para acabar con este intrusismo que padecen. «Incluso pedimos responsabilidad a algunas de ellas que, en contra de lo que dicen las leyes, prefieren contratar a guías no oficiales para excursiones que montan porque les sale mucho más económico que contar con uno de nosotros, que pasamos un examen y disponemos con una preparación probada», manifestó uno de los asistentes a este encuentro. Cano precisó que hace 20 años los guías oficiales fletaban varios autobuses que partían de Benidorm, y ahora esos mismos autocares los llenan los «intrusos». «La mayoría de los que residimos aquí nos tenemos que ir fuera a trabajar», declaró.
Rosel Javaloy, otra guía miembro de AGUITUR que también trabaja por esta zona, resaltó que hace unos días llevó a Benidorm a un grupo de gallegos «y se quedaron sorprendidos de que Benidorm tuviera casco antiguo, restos arqueológicos y, en definitiva, una historia que contar muy atractiva».
Jordi Linares tiene previsto ponerse en contacto con las diferentes administraciones que intervienen en la política turística de Benidorm para abordar estas problemáticas. Con todo, otros miembros de AGUITUR recalcaron que el problema de que no se apueste por otro tipo de turismo y por contratar guías oficiales no es solo de los organismos públicos, sino también de grandes touroperadores, «que muchas veces optan más por lo económico que por lo profesional», incidieron.
