La concejalía de Comercio de Benidorm pretende relanzar la imagen del mercado municipal, que cuenta con casi la mitad de sus puestos cerrados, respondiendo así a las quejas de los comerciantes que aseguran sentirse «ignorados» por la inacción de las autoridades, ante la imagen de «abandono» que proyecta el mercado con un gran número de sus espacios vacíos.
Para ello, el equipo de gobierno propondrá, según tiene previsto «en el próximo pleno», presentar una moción mediante la que se acuerde la aprobación de unos nuevos pliegos para sacar a licitación los 8 puestos que están sin adjudicar, que incluirían «unas condiciones de pago más asequibles para poder pagar el puesto durante 25 años, en lugar de tener que abonar la cantidad íntegra a la entrada», explicaron fuentes municipales.
Además, desde la concejalía contemplan presentar una propuesta para desbloquear la situación de la única cafetería del mercado, que lleva varios años cerrada a petición del Ayuntamiento, «para evitar un agravio comparativo con el resto de los comerciantes, al no llegar a un consenso con el adjudicatario sobre ciertos trámites de pago», tal y como pudo conocer este diario.
La propuesta de Comercio iría encaminada a solucionar el cierre de la cafetería, «permitiendo que la mercantil adjudicataria del bar se pudiera acoger también a los nuevos criterios de pago, que fueron aprobados tras su concesión y a los que se podrán acoger los nuevos adjudicatarios de los puestos vacíos», explicaron las mismas fuentes.
Se trata de una solución, recomendada por los técnicos municipales, para evitar «un contencioso-administrativo entre el Ayuntamiento y la concesionaria del bar, que obligaría a mantener el cierre durante años», en perjuicio de la imagen del mercado, pues, según el resto de puestos abiertos, «la cafetería es un servicio primordial y uno de los principales atractivos de afluencia de público».
En el momento en que «Intervención fiscalice los pliegos y la propuesta de Comercio, está previsto que pasen por el pleno de la Corporación de octubre», indicaron desde la concejalía.
Al parecer, según fuentes del Ayuntamiento, el problema con la mercantil adjudicataria del bar tiene su origen en que «la cafetería responsabiliza al Consistorio de que no pudiera pedir un préstamo para efectuar el pago de la concesión, pues necesita un documento que tendría que presentar el propio Ayuntamiento, pero que éste último no dispone, por cuestiones ajenas a su potestad».
Mientras, los comerciantes de los puestos abiertos del mercado reclaman una solución para cambiar la imagen de «lugar medio cerrado, que tanto daño ha hecho», dijeron a este diario. En esta línea, exigen al Ayuntamiento una solución para que se recupere «la alegría que daba tener una cafetería abierta dentro del mercado. Sobre todo nos afecta a la imagen de los que estamos alrededor. Los puestos cerrados no aportan nada», coincidían los comerciantes.
