Apretados y disfrutando. Así vieron los miles de turistas, vecinos y festeros de Benidorm la entrada de las filaes de los Moros y Cristianos, festividad celebrada durante esta semana en la ciudad. Las calles de la localidad costera se llenaron ayer para ver uno de los pasos más multitudinarios de los últimos años en la capital turística, que se llenó un año más de música, trajes coloridos y danzas que recuerdan a la época. Este año, según comentó a este diario el presidente de la Asociación de Moros y Cristianos de Benidorm y rey moro el año pasado, Luis García, participaron más de 1.000 personas, entre festeros, bailarinas y músicos. Una cifra que no alcanzaban los últimos años, tal y como destacó García, y que como consecuencia hizo disfrutar durante más tiempo al público.

Tras la reconquista por las tropas cristianas de la fortaleza, escenificada en la calle Gambo el viernes por la tarde, llegaba la entrada. Ésta la abrió la abanderada Mª Carmen Marqueño Moreno subida a una carroza junto a un dragón morado y al ritmo de la colla de xirimiters de la Marina Baixa, con Tuaregs, cuyo estandarte lo portaron a caballo. El cabo batidor era Antonio Cazorla y tras él apareció la escuadra de mujeres, el cabo de la escuadra oficial con la banda musical «La Nova» y a ritmo de la marcha «Éxodo».

Después del estandarte de la filà de los musulmanes Tagarinos, iba la escuadra de mujeres dirigida por Davinia Solbes, y tras todas ellas, el cabo de la escuadra oficial, Víctor Teuler, al que le seguía la banda de música «El Atrilet». Y por último, la cabo de la escuadra invitada, Virginia Ramos.

Para finalizar con el bando moro llegó la filà de su reina: los Nazaríes. Tras el estandarte pasaron las escuadras de mujeres y hombres, y la banda de música de Jalón. Con ellos, la carroza de los niños y el boato de la reina mora. Tras los carros de los mercaderes y el embajador moro a caballo, llegaron las rodellas, las niñas Marta Márquez Blanco y Desiré Márquez Ferrer. Para cerrar este paso hizo su entrada la reina mora, Estrella Sánchez, en su carroza acompañada de un león.

Tras esto llegaba el turno del bando cristiano. La entrada comenzó con los Cruzados, que encabezó la abanderada de la filà por el 25 aniversario, Toñi Urbano. Tras ella, las escuadras especiales por esta efeméride, y las de mujeres y hombres.

Siguió con los Astures, que iluminaban el paso portando sus antorchas.

Y llegó el momento de los Cavallers de la Baronía, filá a la que pertenece el rey cristiano Francisco Javier Cidrón. Antes de que llegara su momento, pasaron unos animados mercados medievales, y el cabo y edil de Fiestas, Jesús Carrobles. La dama, Trinidad Roldán Bertomeu, acompañó en su carroza al rey Cristiano, junto a ellos, los rodellas María y Miguel Cidrón Roldán.