Nunca antes en la Comunidad Valenciana cambiar una tubería en la vía pública ha sido tan rápido y sin molestias: sin zanjas, polvo, ni calles cerradas al paso durante meses. Una pionera tecnología alemana ha permitido reparar en dos días el conducto del Paseo de Colón de Benidorm que recoge las aguas pluviales y que reventó por las fuertes lluvias del pasado 7 de septiembre.

Con el sistema tradicional, la misma reparación de la tubería de 210 metros de longitud dañada, hubiese tardado más de dos meses, con las consecuentes molestias para vecinos y comercios. En este caso, y por primera vez en la Comunidad Valenciana, la empresa concesionaria de abastecimiento de agua y alcantarillado (Hidraqua) utilizó un sistema innovador que no requiere abrir zanjas ni extraer el conducto defectuoso; una técnica que sólo se ha utilizado en Barcelona y ahora en Benidorm.

El procedimiento consiste en introducir una cámara de poliéster reforzado de fibra de vidrio de menos de 6mm de espesor, que se introduce por la alcantarilla en la tubería dañada. Tal y como explicó ayer el gerente de Hidraqua, Javier Díez, «a través de un hinchado a baja presión y unas lámparas ultravioletas que dan calor», la cámara va cobrando forma hasta que consigue el mismo diámetro que la anterior tubería, en este caso de 700 mm. El conducto defectuoso se queda como esqueleto de refuerzo y el nuevo recoge el testigo para un uso «con todas las garantías para los próximos 10 años con el mismo mantenimiento», manifestó el delegado.

Rapidez y pocas molestias

El concejal de Ciclo del Agua, José Ramón González de Zárate, destacó ayer la rapidez y las «pocas molestias» que ha ocasionado el arreglo para vecinos y comerciantes, algo «prioritario en una ciudad tan turística como Benidorm». En esta línea, subrayó que las obras hubiesen afectado al acceso de la playa Mal Pas y el Club Náutico de Benidorm, «influyendo incluso en el programa de las próximas Fiestas Patronales».

Por su parte, los establecimientos comerciales con terrazas al público de la vía coincidieron en que apenas se han notado las obras: «no ha habido casi ruido, ni suciedad. Metían los tubos por la alcantarilla, trabajaban por un lado con un gran camión y dejaban pasar por el otro», relataba ayer el encargado de una arrocería de la calle afectada. «Esperemos que funcione y aguante para la próxima vez que llueva», comentaban en otro restaurante de la calle.

Ahorro

Según el gobierno municipal, este sistema permitió ahorrar «más de 100.000 euros» en la reparación del paseo de Colón. «Ha costado un 50 por ciento menos de lo que hubiese costado una obra tradicional, en este caso se hubieran superado los 240.000 euros, incluyendo la mano de obra», manifestó el edil del área.

En este sentido, el concejal adelantó que «se va a intentar planificar con la concesionaria Hidraqua el refuerzo de tuberías pluviales y alcantarillado en varias zonas de la ciudad, dada la eficacia del sistema». Está previsto que más adelante se puedan rehabilitar también las tuberías de agua potable con este sistema sin zanjas.